Dicen que las nuevas generaciones no sirven para nada, ni siquiera para trabajar. Por eso lo quisimos confirmar con los managers de varias compañías.
Los jóvenes de hoy en día se quejan de todo, tanto que parecen de cristal porque no se aguantan nada. Por eso quisimos comprobar qué tan buenos empleados son los chicos de estas nuevas generaciones y cómo deberías de tratarlo si salen bien ineptos.