Muchos ladrones logran su cometido y salen con su botín completo, pero otros fracasan en el intento y terminan todo mal por brutos.
Robar no es para todo el mundo, si quieres ser un ladrón exitoso, debes tener un mínimo de inteligencia o vas a terminar como el ratero más estúpido del mundo.
Tener paz es poder ver la tele tranquilo, comerte un buen filete y no escuchar los estridentes ruidos de tu jefa hablándote todo el tiempo.