Las fiestas de fin de año son bien peligrosas cuando te encuentras de frente con la cuñada que te gusta. ¡No seas Grinch y déjala pasar!
Imagina tener una cuñada que siempre que te ve te hace miradas coquetas, o te pone más atención que tu mujer cuando cuentas tus historias. Pues bien mi amigo... en esta navidad la vas a ver de frente y puede ser tu oportunidad de atacar... o de dañar tu matrimonio.