Muchas veces prestamos dinero para ayudar a alguien y terminamos perdiendo nuestro dinero y esa mala amistad que nunca nos pagó.
Hay gente que se dedica a prestar dinero y le va muy bien, pero si te fijas, tienen mala relación con su familia y tienen muy pocos amigos.
Escucha tristes historias de gente que por intentar ayudar a un ser querido, terminó perdiendo esa relación y todo su dinero. ¡Mala paga!