Nunca le creas a las llamadas pidiendo ayuda, ni siquiera si es tu propia madre la que está llorando del otro lado de la línea.
Escucha la loca historia de un muchacho que casi es estafado por su propia madre... Bueno, casi, porque era la voz de su madre, pero hecha con Inteligencia Artificial.
¡No caigas en las estafas telefónicas!