Todas las personas que se atreven a pedirle matrimonio a su pareja suelen hacerlo de una manera que nunca olvidarán, pero alguno se pasan de lanza y ponen en riesgo sus vidas.
Cuando vas a pedir matrimonio ya te estás poniendo la soga al cuello, pero hay gente que eso no le basta y pone en riesgo su vida y hasta la de su pareja con tal de hacer algo bien épico y extremo para la propuesta.