Hay gente que usa su trabajo, a sus hijos y hasta a su pobre madre enferma para ponerlos de excusa y ponerle el cuerno a su mujer.
Las personas que ponen el cuerno deben tener una buena excusa para salir de casa y cometer el pecado. Sin embargo, hay gente que no piensa demasiado y usa de excusa las cosas más insólitas y terminan descubriéndolos.