Mucha gente se encuentra dinero tirado en la calle y lo primero que piensa es en qué gastárselo. Algunos lo devuelven, otros se lo gastan y se arrepienten.
Imagina encontrar una maleta con mucho dinero... el sueño de muchos porque puedes pagar deudas, comprar lo que quieras y hasta invitar a tu amante a cenar.
Sin embargo, muchas veces cuando te gastas el dinero tu consciencia no queda tranquila. ¿Te ha pasado?