Ser niño debería ser la mejor época para una persona, pero a muchos les toca bien duro desde morritos, incluso poniendo en riesgos sus vidas porque les toca trabajar.
Los niños no deberían trabajar, pero a veces la situación de la casa es tan complicada, que no queda de otra que salir a vender cualquier cosa para ayudar con los gastos.
Escucha la historia que tenemos hoy y seguramente se te arrugará el corazón.