Acabamos de encontrar un nuevo tipo de infidelidad: ¡La gastronómica! Escucha por qué algunas mujeres creen que es de infieles no comerse lo que ellas preparan.
Hay veces que el lonche que nos preparan en la casa no nos gusta tanto, como el que hacen otras personas. Por eso solemos comer por fuera o aceptar el lonche que amablemente nos preparan en otra casa.
Pero hacer que tu mujer se levante temprano, te cocine, te empaque la comida y piense en lo bien que te vas a sentir cuando te la comas... deberías sentirte agradecido, y no comerte lo que tu amiga del trabajo prepara. ¡Serías un infiel gastronómico!