Estados Unidos le puso aranceles a varios productos mexicanos lo que causó una pequeña crisis diplomática y gastronómica que ya se solucionó.
Que se metan con todo, menos con los tacos. Y es que precisamente los aranceles que Trump le había puesto a los productos mexicanos iba a ocasionar que se incrementaran los precios de los tacos, el picante y hasta al aguacate. Menos mal ya se solucionó, pero nos dio un gran susto el viejo Donald.